Congruencia, credibilidad y liderazgo
¿Qué diferencia a los lideres creíbles y congruentes de aquellos que no tienen credibilidad?
La credibilidad en ocasiones no está vinculada con la verdad. Un líder puede compartir a sus colaboradores un mensaje totalmente veraz y estos pueden llegar a no creerle pues la credibilidad necesita de confianza.
La credibilidad no es algo con lo que se nace, sino que es una virtud que se construye a través de esfuerzo y trabajo duro. Un líder necesita fomentar su credibilidad para lograr el nivel de respeto y lealtad necesaria para que su equipo sea totalmente eficiente. Estos consejos te pueden ayudar a aumentar considerablemente tu credibilidad y confiabilidad.
6 Consejos para ser un líder creíble, congruente y confiable.
- Respeta a tu equipo para ganarte su respeto. Los líderes creíbles comprenden la importancia de tratar a las personas con respeto, no porque lo esperen, sino porque lo merecen. Y cuando respetas a tu equipo, ellos devolverán ese respeto. Se pueden otorgar títulos y puestos, pero el respeto es algo que se gana, y es uno de los elementos más importantes de la credibilidad.
- Sé congruente. La gente responde de forma muy positiva a la congruencia. Sé coherente con lo que piensas, dices y haces. Situaciones tan impredecibles y cambiantes como las que vivimos en las organizaciones actualmente necesita de líderes congruentes y estables. Los líderes impredecibles son inquietantes y perturbadores y mantienen a su equipo en un estad constante de incertidumbre y tensión.
- Sé fiel a ti mismo y a los demás. Sé auténtico. Sé sincero y muéstrate tal y cómo eres. La autenticidad es el grado en que tus acciones están alineadas con tus creencias y deseos, a pesar de presiones externas e influencias que son muy diferentes a ti mismo.Hay mucho poder en ser auténtico y genuino. Los líderes ganan credibilidad y confianza cuando son sinceros acerca de quiénes son y demuestran que están dispuestos a defender sus valores y sus líneas de pensamiento.
- Comunícate con transparencia. Es importante ir siempre de cara hacia tus colaboradores y comunicarte con franqueza y espíritu de honestidad. La honestidad y la franqueza contribuyen en gran medida a establecer y mantener tu credibilidad. Comunícate con empatía y asertividad. Aprende a marcar límites y diseñar tus discursos a través de los hechos y no de tus percepciones sobre esto. Recuerda que el mundo lo vemos cómo somos, no cómo es.
- Di la verdad. Los líderes creíbles siguen la voz de su integridad personal. Nunca manipulan la verdad para salir de una situación difícil o ganar ventaja en una negociación. No esconden detalles desagradables para mantener su imagen integra. Haz que tu palabra sea tan buena como la verdad. Comparte con tu equipo toda la información relevante para que puedan ser eficientes en su día a día.
- Responsabilidad. Hazte plenamente responsable de tus decisiones y comportamientos. Cuando cometas un error, confíe en ti y toma las medidas necesarias para corregirlo. Pide perdón si fuera necesario. Sé integro en cada situación, con ello recibirás no solo credibilidad sino también admiración por parte de tus colaboradores.
Tu credibilidad como líder juega un papel muy importante para determinar si las personas quieren seguirte o no, si te respetarán o no, y si te serán leales o no. Es uno de los mayores activos que un líder puede tener. Es un valor que se extiende más allá de los colaboradores, es una virtud que te ayudará a influir positivamente también en los clientes, los inversores, tus pares y a toda su organización.
Es fácil convertirse en un líder, pero es difícil convertirse en uno líder creíble. Se necesitan años de trabajo duro sostenido para ganar un alto nivel de credibilidad, pero los grandes beneficios que obtendrás bien valen el esfuerzo. Recuerda esto siempre: después de la primera mentira a tu equipo, toda tu verdad se convertirá en duda y un equipo que duda, es un equipo que sufre.